España cuenta con 27 Orquestas Sinfónicas Profesionales. Solo Cantabria, Casilla la Mancha, La Rioja y Aragón carecen de una propia.
Patrizia Estebaranz estudió en el Conservatorio Superior de Música de Aragón (CSMA). A posteriori, marchó a Holanda y Alemania donde cursó los másteres de violín y de interpretación orquestal. Ha formado parte de orquestas alemanas como la Gürzenich de Colonia, la Mahler Chamber Orchestra, o la Duisburger Philhamoniker. Vive por y para la música. Pero también aspira a vivir de ella, en Aragón.
Esta Comunidad Autónoma cuenta con un auditorio de prestigio mundial y un conservatorio superior de referencia nacional. Sin embargo, es de las pocas Autonomías que no cuenta con una orquesta profesional propia, financiada por fondos públicos. Esta es la realidad con la que se encuentran muchos músicos aragoneses.
Estos artistas regionales no pueden vivir de la música en su Comunidad, si lo que quieren es formar parte de una orquesta. Trasladarse a otra autonomía que sí posea agrupación musical profesional, probar suerte en el extranjero u opositar directamente a la docencia, esas son las opciones que barajarán los alumnos que este año finalizan su cuarto curso en el CSMA. Y tantos otros que abandonaron las aulas del conservatorio en años anteriores.
Formaciones musicales
Aragón ha contado –y cuenta- con varias formaciones musicales. La Orquesta Sinfónica de Aragón dirigida por Emilio Reina, la Banda de Ángel Millán o las actuales orquestas sinfónicas Goya y la ORA (Orquesta del Reino de Aragón) dirigida por Sergio Casero, “pero no convocan audiciones ni proporcionan una estabilidad económica suficiente para poder pagar una hipoteca” se queja la violinista, mientras deja en el aire otros temas como los contratos con la Seguridad Social.
La buena querencia de profesores y alumnos del Conservatorio ha logrado la existencia de bandas y orquestas que impiden la sepultura total de la cultura musical. Empero, escasean las subvenciones para mantenerlas, y perviven gracias “al amor al arte” de sus jóvenes conformantes. “Es probable que en cualquier otro sitio las administraciones apoyen mucho más a cualquier músico”, confiesa Patrizia.
La Dirección General de Aragón ha manifestado en diferentes ocasiones que no sería posible mantener la rentabilidad de una orquesta profesional. La músico cree que “Zaragoza está invirtiendo en cultura, pero en la música hay una laguna en el que las demás comunidades autónomas nos están dejando atrás”, y asegura que “no podemos tener un auditorio tan prestigioso y que mayoritariamente esté siendo usado para traer músicos de fuera, esto a larga acarreará más gasto que si una orquesta autonómica se encargara de alimentar de música a Aragón”. No lo descarta, ya que “esto debe ser así, para nutrir la programación de grandes artistas, pero es necesario que se potencie a los artistas de aquí, de nuestra tierra”.
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