Ha trabajado en medios de comunicación como Televisión Española o Cadena Cope y desde el año 2005 dirige Aragón TV, la televisión autonómica de Aragón. Asegura estar satisfecho con los resultados obtenidos durante los seis primeros años de emisión y cree que las claves de la buena acogida del canal autonómico están en su modelo mixto, en sus contenidos y en sus trabajadores. Además, afirma que Aragón TV no es un lujo para la comunidad autónoma, ya que, hoy por hoy, es un medio bastante sostenible. No obstante, critica los modelos de otros canales autonómicos, que han terminado por no poder asumir la deuda que generaban año tras año.
Dragón Digital.- Aragón TV lleva ya seis años de emisiones ¿Está satisfecho con los resultados?
Pepe Quílez.- Los resultados siempre son mejorables, pero estoy bastante satisfecho por varias razones. Primero, porque el modelo elegido para poner en marcha Aragón Televisión, que es un modelo de televisión pública con mucha participación de la iniciativa privada, ha demostrado ser sostenible económicamente en el tiempo, una cuestión fundamental, sobre todo teniendo en cuenta cómo están las cosas en estos momentos. Segundo, porque la oferta de programación que venimos haciendo en estos seis años nos ha permitido ser la tercera autonómica más vista. Solo nos superan TV3 y la TVG. Estamos por encima del 10% de cuota de pantalla, lo cual es una cifra realmente fantástica. Además, estoy satisfecho porque, de momento, tampoco ha habido despidos, no solamente entre la gente que depende de la estructura propia de la televisión, que no sobrepasa las 100 personas, sino del entorno de las productoras grandes que trabajan para nosotros. En todo caso no ha habido alguna renovación de contrato, pero despidos no ha habido ninguno afortunadamente. También es un motivo de análisis la cantidad de profesionales jóvenes que están incorporados a este proyecto con todo lo que ello supone en aportación, creación de valor, nuevas tecnologías etc. Cuando se puso en marcha el proyecto en el año 2005, el sector audiovisual en Aragón empleaba aproximadamente unos 200 profesionales. En estos cinco años ha aumentado y ahora estamos en torno a los 700.
D.D.- ¿Cree que el contenido de Aragón TV se ajusta a lo que piden los aragoneses?
P.Q.- Aragón TV emite el contenido que podemos permitirnos. Creo que, por una parte, los aragoneses sí estarán satisfechos con ese contenido, pero estoy convencido de que en otros momentos querrían algo diferente, como puede ser la ficción propia, que, además, sería un impulso para la industria audiovisual de Aragón. Esa es nuestra gran asignatura pendiente, el no tener la capacidad económica para poder producir ficción propia.
D.D.- Si se diese el paso, ¿TV3 sería el modelo a seguir?
P.Q.- TV3 es un modelo a seguir en cuanto a la producción propia, al igual que la televisión de Galicia. Son las dos cadenas en las que habría que fijarse. No obstante, las condiciones socioeconómicas y políticas de las dos son muy diferentes. Para empezar, están en comunidades donde hay muchos más habitantes, tienen lengua propia y, además, tienen mucho más presupuesto que nosotros.
D.D.- Hay quien dice que ha habido dos etapas diferenciadas en Aragón TV. La primera corresponde a sus inicios (hasta el 2009 aproximadamente) y la segunda llega hasta la actualidad. ¿Está de acuerdo?
P.Q.- Creo que es una observación bastante acertada. En el momento en que la crisis se hace presente y empieza a afectar a los presupuestos comienzan a notarse los cambios. Hasta 2010 veníamos teniendo un presupuesto determinado y a partir de entonces tuvimos menos, pero no solamente nosotros, también la sanidad o la educación. Los presupuestos son menores, hay que hacer frente a los recortes y, además, hay que ajustarse a lo que toca. La televisión es muy importante, pero es más importante la sanidad y la educación.
D.D.- ¿Cree que hemos llegado a un punto en el que mantener una televisión autonómica es un lujo?
P.Q.- Tener una televisión autonómica es muy importante para cualquier comunidad autónoma, pero es muy importante si se la puede permitir. Si no se la puente permitir, sencillamente es un lujo. Ahora bien, hay que distinguir entre autonómicas con modelos sostenibles y las que siguen un modelo claramente insostenible en el tiempo. Las más antiguas mimetizaron el modelo de RTVE, lo que les ha terminado perjudicando. Se han encontrado con que tienen serios problemas de viabilidad económica. Nuestro caso es completamente diferente, no tenemos ese problema. Hoy por hoy somos bastante sostenibles.
D.D.- ¿Cuáles son las luces y sombras del modelo mixto de Aragón TV?
P.Q.- Se tiene una estructura propia muy pequeña. La gran estructura que necesita la televisión está soportada en empresas privadas, pero a su vez, estas empresas aportan muchísima frescura, flexibilidad y formas de productividad diferentes a cómo se trabaja habitualmente en el sector público.
D.D.- El pasado 14 de noviembre, 200 periodistas salieron a la calle portando pancartas con lemas como: “No la pagan los políticos, la pagas tú”. ¿Qué opina del modelo de televisión pública que tenemos en España?
P.Q.- Los periodistas, igual que cualquier otro colectivo en este momento, están afectados por la crisis general del país y, en este caso, la que afecta al periodismo y a los medios de comunicación. No puedo sino respetar la posición de los periodistas que salieron a la calle. En cuanto a este tipo de eslóganes, la TV la paga el dinero público, que es de todos, evidentemente. Por tanto, es tuya, mía y de todos.
D.D.- Es director de Aragón TV con un gobierno del PP-PAR y lo ha sido con un gobierno del PSOE-PAR ¿cuál es su secreto?
P.Q.- Creo que no hay ningún secreto, lo que hay es una forma de trabajar y hacer las cosas que no tiene nada que ver con la politización del medio sino con tratar de hacer una televisión responsable con un nivel de calidad mínimo y hacer que, además, la gestión sea transparente.
D.D.- En los últimos años se han producido recortes de personal en medios como la televisión valenciana o Telemadrid ¿Cree que el modelo autonómico estaba destinado a explotar?
P.Q.- Los modelos que había en algunas televisiones autonómicas tenían que explotar sí o sí. Tardarían más o menos, pero eran modelos que no podían aguantar la deuda que estaban sistemáticamente produciendo. Cada año aumentaba el nivel de déficit y eso es insostenible. Esto tenía que cortarse en algún momento.
D.D.- ¿Peligran o peligrarán los puestos de trabajo en Aragón TV o en sus productoras?
P.Q.- Hoy por hoy no, aunque no cabe duda que si la crisis continúa y a nosotros se nos reducen los ingresos cada vez más habrá un momento en el que no podremos hacer todo lo que hacemos y habrá que pensar en reducir las horas de programación y producción, pero, de momento, yo estaría bastante tranquilo.
D.D.- ¿Dónde ve a Aragón TV dentro de cinco años?
P.Q.- Yo creo que va a ser una televisión que va a superar con bastante buenos resultados la crisis. La crisis nos ha enseñado a gestionar con otro tipo de recursos, propuestas y planteamientos, lo que terminará siendo beneficioso a la larga, ya que se podrá producir más y mejor utilizando otro tipo de iniciativas. Es una televisión que se mantendrá en el tiempo y que dará muchísima importancia a la proximidad, a identificarse con Aragón y con los aragoneses. Además, puede ser el motor de una industria audiovisual más potente que la que tenemos actualmente.
D.D.- Hay quienes dicen que Aragón TV podría llegar a desaparecer, ¿cree que esto es posible?
P.Q.- Yo creo que la televisión, a pesar de todas las dificultades, tiene un futuro fantástico. Es el medio de comunicación que más se consume en este momento y que más se va a consumir en un futuro próximo. Hace tiempo decíamos que Internet iba a acabar con la televisión y, sin embargo, Internet está lleno de televisión. Si no existiera la televisión, Internet quedaría vacío de contenidos, por lo menos en un porcentaje altísimo. Ahora bien, se tendrá que hacer de otra manera, aunque no se cómo será.
D.D.- ¿Qué pasará en los próximos años con proyectos como el canal de alta definición?
P.Q.- Creo que, una vez que superemos la crisis, situaciones tecnológicas como la alta definición van a seguir avanzando y van a ser imparables. Esto está parado ahora mismo porque no hay capacidad de inversión. Para poder hacer un canal en HD hay que adaptar toda la maquinaria de producción a esta tecnología, y eso exige una inversión. Producir en HD es más caro que hacerlo en calidad estándar. Lo que ocurre es que solamente un tercio de los televisores de España están adaptados a la alta definición, y ahora no hay dinero para comprarse un televisor de estas características. Cuando el número de televisiones aumente, la demanda aumentará. La televisión en 3D me parece todavía algo lejano, pero el HD es una realidad.
D.D.- ¿Cómo ve la situación actual del periodismo?
P.Q.- El periodismo vive dos crisis. Está pasando por un momento muy complicado porque las empresas y los modelos actuales están en crisis. No se ha sabido afrontar con garantías todo lo que ha significado la digitalización. Tampoco se ha sabido digerir el fenómeno de las redes sociales. Sabemos que nos pasa algo, pero no sabemos muy bien qué es y no encontramos la respuesta. No tenemos identificadas las puertas de salida de la crisis particular que vive el periodismo.
D.D.- ¿Cree que hay sitio para los jóvenes periodistas en los medios tradicionales de Aragón?
P.Q.- Ahora el sitio hay que buscarlo en cualquier soporte, no se puede hablar ya de medios tradicionales sino de plataformas. Creo que todo está muy interrelacionado, que las salidas pueden ser muy diversas y hay que tenerlas todas en cuenta. El periodismo es más necesario ahora que otras veces. Sin un periodismo serio, riguroso y responsable, las sociedades democráticas empezarían a tener déficits muy importantes. Tiene que ser un elemento fundamental en las sociedades desarrolladas.
D.D.- Ahora todo el mundo puede informar desde su cuenta de Twitter, ¿cree que se ha desdibujado el papel del periodista?
P.Q.- Cualquiera se puede comunicar, pero hay que distinguir entre comunicación e información. La información es un proceso en el que el periodista está con la fuente y luego informa a un espectador o a un oyente habiendo confirmado y contextualizado los datos. Creo que la información cada día es más valiosa si es buena y, dicho sea de paso, tendremos que pagarla. Si pagamos 1,50 euros por un periódico es porque merece la pena, porque te da el rigor de periodistas profesionales y el respaldo de una cabecera. Los propios periodistas hacemos mal en hablar de información en las redes sociales antes que de comunicación.
D.D.- ¿Cuánto cree que tardarán los medios en encontrar la fórmula adecuada para explotar el medio digital?
P.Q.- No me atrevo a dar una fecha. Ya hace ocho o nueve años se pensaba que a estas alturas estaría solucionado, pero no lo está. La prensa escrita está perdiendo lectores y tirada. Además, tiene unos problemas de financiación importantes porque la publicidad está cayendo vertiginosamente. A ello hay que sumarle que todo lo que se hace hoy por hoy en Internet, como modelo de negocio, no está funcionando porque no hay retornos suficientes. La prensa escrita lo tiene más complicado que los medios audiovisuales.
D.D.- ¿Cómo se sale de esta situación?
P.Q.- Con mucho trabajo, esfuerzo, imaginación, talento y paciencia. Esta crisis es muy dura y muy profunda. Salir, saldremos, pero no sé cómo.
Informa: Jorge Lisbona
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