Dispositivos, la mayoría de tan solo seis pulgadas, con los que podemos acceder a literatura adaptada al formato, escuchar música, ver vídeos o navegar por Internet. También el Periodismo se está haciendo su hueco en los ebooks y las expectativas apuntan a que vaya a más.
“Entrevista, reportaje, crónica, artículo, ensayo… Hay muchos géneros susceptibles de convertirse en libro electrónico”, advertía Pablo Barrio Aller en una jornada dedicada a este instrumento en la Asociación de Periodistas de Aragón (APA) el 6 de marzo. Este taller forma parte del XIII Congreso de Periodismo Digital.
Barrio es el creador y director del proyecto de edición digital Ganso y Pulpo. Desde el año 2010 se dedica profesionalmente a la composición de libros electrónicos para distintas editoriales. Ha sido uno de los encargados de mostrar a los asistentes los conocimientos teóricos y prácticos sobre esta materia. Resaltó la importancia de una precisión milimétrica a la hora de editar este tipo de libros para evitarnos así problemas.
Son muchos los cambios frente a los libros de papel. En este dispositivo se pueden incluir todo tipo de archivos o enlaces que expliquen mejor una idea escrita. El concepto número de página no existe en el libro electrónico, el índice actúa como esquema interactivo. Y, como asegura Barrio: “Al final se sustituirá aquello de ‘este libro terminó de imprimirse tal día’ por ‘este libro se compuso electrónicamente en tal fecha’”.
Marc Herman, periodista colaborador en The Atlantic Monthly, Miller-McCune, GQ y Harper’s, centró su conferencia en este sentido: “Aunque el antiguo modelo de prensa muera, hay ciertas cosas que debemos rescatar para que el Periodismo no rebaje su calidad”. Para ello, propuso comenzar por no continuar con el modelo de periodista que escribe, graba vídeos, hace las fotografías, diseña contenidos, hace su propio marketing… Todo con peor calidad que si lo hace un profesional especializado.
Él, para sus proyectos, cuenta con profesionales de todos los sectores y se distribuyen las tareas. En su libro Las costas de Trípoli, publicado recientemente en Amazon Single, Herman contrató a un diseñador para crear la portada a partir de una fotografía propia y otra que compró a Associated Press.
“Es probable que en el ebook esté el periodismo en el futuro, la idea es publicar estas historias en pocas páginas cuando el tema todavía está en la memoria de la gente”, asegura Herman. Una editorial para libros electrónicos es muy barata de hacer porque cuenta con los sueldos del director, del diseñador y del editor. Pero son equipos de varias personas, trabajo en grupo. El precio de cada libro es bajo, Las costas de Trípoli cuesta 2.68 Euros, pero no incluye fotografías o vídeo porque la descarga se encarece.
Fernando García, periodista, tiene un blog (Sin Tinta) en el que promociona libros electrónicos autoeditados. Según él, el manejo es muy sencillo una vez que sepamos cómo se editan capítulos y otras cuestiones. El funcionamiento del lenguaje HTML no está todavía al alcance de todos, pero una serie de programas pueden sernos muy útiles para editar prescindiendo de este código. Amazon, por ejemplo, tiene un servicio de autoedición; envías la portada y el texto en pdf y lo editan.
Texto y foto por Sergio Lacasa
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