La revista Voluntas se asienta con la publicación de su número 12

Voluntas, voluntad en latín, es la palabra que mejor representa tanto a la revista como a todos los estudiantes que hacen realidad este original proyecto comunicativo sin ánimo de lucro. La publicación universitaria independiente cuenta desde este mes de septiembre con 12 números, lo que les ha permitido afianzarse como un medio informativo y dinámico.

Fue el 15 de marzo de 2011 cuando ocho alumnos de Comunicación de la Universidad San Jorge de Zaragoza dieron rienda suelta a sus aspiraciones periodísticas con el propósito de llevar sus trabajos más allá de lo académico. “Llegamos a segundo de periodismo y nos dimos cuenta de que no estábamos haciendo nada, de que hacíamos trabajos que nadie leía y que no iban a ninguna parte”, explica Luis Navarro García, editor creativo de Voluntas.

Actualmente la revista está formada por siete componentes debido a la inclusión de Adrián Vázquez y Javier Pardos y el abandono de  Jorge Zorraquín, Tomás Iliescu y Sergio Lacasa, compañeros de facultad. En estos siete encontramos cuatro redactores, un diseñador maquetador, un desarrollador web y un ilustrador.

Voluntas presume de ser independiente, pero la emancipación no es completa sin un local propio en el que desarrollar sus ideas. El lugar de trabajo de estos jóvenes son casas y bares, ya que no han podido conseguir un establecimiento fijo donde redactar. “Estamos viendo a ver si nos ceden algún local, somos  gente joven que tenemos iniciativa y queremos trabajar”, explica Enrique Salvo Lizalde, diseñador gráfico de la publicación.

La ambición de asentarse como medio también se refleja en los cambios que ha experimentado tanto en el formato físico como en la tirada. “Desde el cuarto número no cobramos nada por la revista porque contamos con el apoyo de anunciantes, esto nos ha permitido utilizar el papel propio de una revista”, señala Luis Navarro.

La tirada de la publicación consta de 2000 ejemplares que entregan de forma personal a diferentes bares y universidades cada dos meses, tiempo que tarda en salir cada número. Por otra parte, las redes sociales han ayudado a la revista en su divulgación. En Twitter cuentan con 100 seguidores y en Facebook son ya 391 amigos los que se interesan por los artículos de estos universitarios.

Debido al desarrollo de los medios de comunicación en las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación), Voluntas presentó el miércoles pasado su página web.“Nuestra página web toma referencia de Jot Down, la Belio, Monocle, Visual y El Pollo Urbano, una revista de Zaragoza de los años 70 que descubrimos en la basura”, explica Enrique Salvo.

Voluntas les sirve de puente frente al mundo laboral, ya que a otros medios les resulta más sencillo conocer cómo trabajan. “Cuando fui a hacer prácticas este verano a Heraldo de Aragón aunque no tuviese muy buenas notas vieron la revista y que sabía hacer algo más que estudiar”, afirma Luis Navarro.

En un futuro estos alumnos  quieren seguir apostando por la revista con el deseo de poder ganar dinero con ella. Esto les supone un riesgo sabiendo que los jóvenes emprendedores no suelen contar con un apoyo económico institucional con el que sacar su proyecto adelante.

Una acción emprendedora que hoy ve resultados y que les sirve de plataforma. “Nos ha costado mucho sacrificio la revista y, queremos dejarnos la piel en ella hasta que veamos que ya no nos da para más”, explica Enrique Salvo. Este grupo tiene una clara finalidad: poder darse el gusto de escribir lo que les apetece y apasiona en su propio medio convirtiéndose en referencia para otros lectores.

En la sección “Bocazas” personajes conocidos son caracterizados con alargadas bocas y citas incoherentes dando un toque más dinámico y desenfadado a Voluntas.

A la pregunta de cómo se les ocurrió hacer una sección como la de  “Bocazas”, Luis Navarro García contestó: “En mi clase del instituto como yo y alguno de mis compañeros nos aburríamos  lo que hacíamos era que uno de ellos, que dibujaba muy bien, ponía la cara de un profesor  en un papel y las rellenábamos de líneas y cuando ese profesor se ponía muy pesado en clase lo que hacíamos era abrir el papel para que pareciese que estaba hablando. En el primer número no salió esta sección pero pensamos en hacer algo más interactivo, propuse esta idea y les pareció buena”.

Entrevista a tres de los alumnos que integran la revista independiente universitaria Voluntas

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