Abogado, escritor de relatos y novela y presidente del Grupo Hélice, Asociación de Autores de Aragón, Julio Cristellys es una de las personalidades más implicadas en dar difusión a las letras aragonesas tanto en el ámbito nacional como en el internacional.
Tras la reciente publicación de su último libro Marejada (2014), Cristellys estará el próximo 28 de abril junto al otro escritor y miembro de la Junta Directiva de la Asociación Aragonesa de Escritores, Miguel Ángel Yusta, en el ciclo cultural Los lunes del Principal para hablar sobre la labor de las dos asociaciones de autores de Aragón.
La sesión organizada por Actividades Culturales USJ j y el Teatro Principal estará moderada por Nacho Escuín en el hall del Teatro Principal (Espacio Mariano Cariñena) a las 20 horas y clausurará el programa del curso 2013-2014.
Dragón Digital.- ¿Cómo ha combinado su vida de abogado y escritor? Ahora que está retirado de la abogacía, ¿dedica más tiempo a la escritura?
Julio Cristellys.- Cuando algo te gusta, y contra lo que pudiera parecer, no es difícil compaginar diferentes actividades. Hay que respetar ante todo el horario destinado a la profesión que es tu medio de vida, pero a veces esta profesión es una fuente de inspiración de historias que escribir.
Ahora dedico algo más de tiempo a la escritura, no mucho más. También empleo mi mayor tiempo libre con otras aficiones como la música y el cine.
DD.- El pasado año, el Grupo Hélice del que es presidente organizó, en colaboración con la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) y el Centro de Libro de Aragón, el premio a la mejor primera obra en prosa de autores aragoneses ¿Tienen pensado organizar otro reconocimiento similar en el 2014 para fomentar los nuevos talentos de la escritura?
J.C.- Sí, ya se han remitido las bases para la convocatoria del segundo Premio de Narrativa Hélice. Espero que ya hayan sido publicadas o que estén a punto de publicarse.
DD.- Como presidente del Grupo Hélice, ¿cuál cree que es la mejor forma de difundir y promover la cultura?
J.C.- No como presidente del Grupo Hélice, sino, como un ciudadano normal y corriente, entiendo que la mejor forma de promover y difundir la cultura empieza por una buena educación y la buena educación comienza por una sólida instrucción.
Es una labor de profesores y maestros, por supuesto, pero también es una principal responsabilidad de los padres.
Al menos para mí, tiene más mérito el niño que, como actividad extraescolar aprende a tocar el violonchelo, que aquel otro que trata de emular en sus horas libres a Ronaldo o a Messi. Y eso, depende en gran medida de si el ambiente familiar propicia una u otra afición.
DD.- Confiesa que su vocación literaria surgió tras la pregunta de su hija Mariana de “Papá: ¿por qué no escribes?”. Tras elaborar los trece Relatos para Mariana, ¿para qué escribe Julio Cristellys?
J.C.- Mi hija Mariana me incitó a escribir. Es imposible resistirse a la petición de un hijo, pero la vocación ya la tenía latente pero Mariana la despertó.
Escribo porque me gusta pero confieso que ignoro para quién escribo, si para mí, para mis lectores…
DD.- Tres de sus cuatro obras, Relatos para Mariana (2004), Caminos de Ronda (2005), y Rasgueos (2010), reúnen una serie de relatos. Madrugada (2008) (2010) fue su primera novela y actualmente está inmerso en la elaboración de una novela ¿puede adelantarnos algo sobre ella?
J.C.- Solo puedo adelantar que la escribo a partir de lo, para mí, sugerido, por los diferentes movimientos de una composición musical.
DD.- También es miembro de la tertulia cinéfila Perdiguer ¿cómo cree que se podría mejorar la actual situación del cine? ¿Considera que medidas como la celebración de la Fiesta del cine son necesarias? ¿Y suficientes?
J.C.- Hay que despertar y avivar la afición por el cine, por el buen cine.
Esta pregunta la encuentro muy relacionada con la que me ha hecho relativa la modo de difundir la cultura. Por ello, volvemos a la escuela y a la familia. Desde la infancia, se ha de educar, ya en el colegio, ya en la familia, en el placer de ver hermosas películas.
A veces cuesta que un niño o un adolescente se siente en el sofá de casa a ver una antigua película de piratas o una comedia de Billy Wilder, pero lo cierto es que, finalizada la cinta, el chaval ha disfrutado y mucho que ha disfrutado.
En cuanto a la segunda parte de su pregunta, bienvenidas sean todas las medidas que favorezcan el incremento de espectadores en las salas.
Informa: Leyre Beazcochea.
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