D.D.- ¿Cómo surge la figura del vicedecano de Alumnos?
Víctor Manuel Pérez.- En la Universidad San Jorge, la única facultad que tiene esta figura es la Facultad de Comunicación. Este cargo ya existía a partir de mediados del curso pasado. Le correspondió a Vanessa Rodriguez el crearlo y darle la primera estructura. Su trabajo ha sido muy importante y útil. Era necesario ir integrando esta estructura dentro del equipo decanal y de la vida de la facultad.
Dragón Digital.- ¿Cuáles son sus funciones?
V.M.P.- La función principal es velar por los intereses de los alumnos de la Facultad de la Comunicación. Su plan de acción, en el que estamos trabajando, estará enfocado a ofrecer un apoyo académico, cultural y profesional al alumno de nuestra facultad. Estamos desarrollando un plan de acción a tres años, con un plan específico para el curso 2012-2013, que se va a ir configurando con otras funciones y objetivos estratégicos más específicos en diversas áreas. El vicedecanato tiene que contribuir a que la actividad de la facultad se pueda llevar a cabo desde el punto de vista académico, cultural y profesional, pero también tiene que estar en comunicación constante con todas las estructuras de la universidad. Otra de las funciones es tratar de crear canales de comunicación más efectivos entre la universidad y los alumnos. Por ello, el vicedecanato está presente en las redes sociales y cuenta con una página web propia.
D.D.- ¿Qué puede aportar a este cargo?
V.M.P.- La experiencia de haber trabajado en el ámbito universitario con diferentes realidades. En definitiva, lo que yo creo que puedo aportar es la visión de que, cuando tú haces esto, estás integrando estas actividades en un plan de formación integral del alumnado. Es algo que no aparecerá en ninguna evaluación, pero ayuda a dar una formación para la vida. Queremos ofrecer diferentes alternativas para que los estudiantes puedan desarrollarse desde el punto de vista personal y profesional. Yo vengo de un ámbito en el que la vida universitaria es importante. Tú pasas diez o veinte años fuera de la universidad y siempre terminas recordando tu alma mater, que es la universidad donde estudiaste. Es un lugar en el que has pasado cuatro o cinco años muy importantes de tu vida y las experiencias que hayas podido vivir allí es muy difícil que vuelvan a repetirse. Hay que aprovechar la vida universitaria: los amigos, las actividades…La Universidad San Jorge, lo reconozcan o no los estudiantes, marcará su forma de ver la vida y de enfrentarse al ámbito profesional.
D.D.- ¿Cuál será la relación entre el vicedecano de Alumnos y los delegados de curso?
V.M.P.- Este año la figura del delegado de curso va a cobrar más importancia y tendrá otros matices entre sus actividades con el objetivo de que contribuya a dinamizar la vida universitaria de la Facultad de Comunicación. Hasta ahora, los alumnos nombraban a un delegado y éste se reunía tres veces al año con el vicedecano de Alumnos y la Unidad Técnica de Calidad. En ese espacio se planteaban los problemas y debilidades de la facultad con el objetivo de buscar soluciones y tratar de resolverlos, pero la idea es que, a partir de ahora, el delegado asuma un papel de liderazgo en su curso. Si un 50% de los delegados que podamos tener logran transformarse en líderes de sus cursos, la vida universitaria de la facultad probablemente mejorará, porque eso se traducirá en actividades, jornadas y nuevos proyectos. La figura del Vicedecanato de Alumnos trata de canalizar los proyectos de los alumnos para que puedan llevarse a cabo. Eso implica una proyección de la facultad, nuevos alumnos…También hay que hacer un trabajo con los estudiantes Incoming que nos visitan, ver cómo se integran en nuestra vida universitaria etc. Somos conscientes de que la figura del delegado se tiene que replantear. Lo que se ha hecho hasta ahora está bien, pero debemos dar un paso más que permita dinamizar la vida de la Facultad de Comunicación. Al margen de ello, se están planificando actividades propias del Vicedecanato de Alumnos, que serán propuestas con una dimensión transversal a todas las titulaciones.
D.D.- ¿Se espera que los nuevos horarios impulsen la vida universitaria?
V.M.P.- La vida universitaria la hace la combinación de profesor, alumno y universidad. Es decir, la universidad puede crear los espacios, pero el alumno tiene sentir que es parte de ella. Hacemos vida universitaria cuando el alumno entiende que puede hacer algo más que ir a clase. La universidad es un espacio en el que puedo desarrollar mis inquietudes e intereses. Canalizar esas inquietudes es un reto interesante y complejo, ya que hay que crear los mecanismos necesarios para que se puedan desarrollar esas actividades. Es muy importante que el alumno entienda que tiene a su disposición todos los servicios de la universidad. Tenemos una gran gama de espacios en el que los estudiantes pueden realizar sus proyectos y desarrollarse como profesionales y como personas. Otro de nuestros retos es comenzar a hablar de qué es una universidad. Una universidad no solo me forma profesionalmente, tiene que tener otros fundamentos y la Universidad San Jorge los tiene.
D.D.- ¿Qué tienen que hacer los alumnos para poder llevar a cabo sus iniciativas?
V.M.P.- Eso es algo que se ha venido haciendo durante todos estos cursos. Los alumnos han desarrollado campañas con ONGs, han hecho jornadas de periodismo digital, de ética… Hay un potencial entre nuestros alumnos que, por el día a día y la dinámica propia de nuestra sociedad, suele pasar desapercibido. En la Facultad de Comunicación se han realizado un gran número de actividades promovidas por los estudiantes. Lo que ocurre es que, probablemente, los canales de comunicación que tenemos ahora no han estado enfocados adecuadamente. Trataremos de impulsar las actividades y ofrecerlas a todos los alumnos de la facultad. Hay que mejorar la cobertura de estos eventos, tiene que haber una mayor coordinación entre los espacios que difunden los contenidos de la Facultad de Comunicación. Tenemos que plantear una estrategia de comunicación en sintonía con la estratégica de la facultad con el objetivo de que el alumno se proyecte en la vida universitaria y fuera de ella. Aquí también entran los antiguos alumnos, que son parte de la comunidad universitaria.
D.D.- ¿A quién tenemos que dirigirnos para plantear nuestras ideas?
V.M.P.- Pueden dirigirse a mí, pero lo importante es que el alumno entienda que si tiene una idea y quiere buscar un espacio para establecer el primer acercamiento tienen varias posibilidades: pueden hablar con el Vicedecanato de Alumnos, con su tutor etc. En este sentido, los delegados de curso tendrán que movilizar a los alumnos para que propongan iniciativas, porque hay algunos que se atreven y otros que necesitan un impulso. También hay estudiantes que están haciendo una serie de actividades que nadie conoce y que son muy importantes para su desarrollo profesional. Así se lo vamos a plantear a los alumnos de nuevo ingreso. Queremos hacer es que esto sea algo normal. Nuestro objetivo es que el alumno se sienta protagonista.
D.D.- ¿Qué actividades se desarrollarán en las primeras semanas del curso?
V.M.P.- Queremos que los alumnos se formen desde el punto de vista profesional, ético y humano para que puedan asumir los retos y desafíos que hay en la vida. La primera de estas actividades fue el día cero y, por ejemplo, del 24 al 30 de septiembre tendremos la ‘Semana de las culturas’, que se desarrolla desde el Grado de Traducción y Comunicación Intercultural, aunque cualquier alumno de la facultad puede participar y acudir a las charlas. Toda esa información será pública. También continuarán el Club de Lectura y el Cineclub, dos espacios ya consolidados.
Informa: Jorge Lisbona
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