La COVID-19 está teniendo una amplia repercusión en el mercado laboral: trabajadores que pierden sus empleos, propietarios que cierran sus negocios o se ven obligados a realizar un ERTE en sus plantillas. Sin embargo, por increíble que parezca, también hay negocios que están generando grandes beneficios y han aumentado su requerimiento laboral en cuanto a volumen de trabajo. Uno de los máximos exponentes de este crecimiento empresarial fruto de la situación en la que nos encontramos es Amazon, empresa de venta y reparto a domicilio que ha visto incrementado su volumen de negocio al aumentar la demanda sus productos. Al fin y al cabo, los confinamientos han potenciado en gran medida las compras online de todo tipo de productos. Además de encontrarnos en un período caracterizado por una incidencia alta en los niveles de desempleo a escala mundial y una recesión económica que agravará la desigualdad entre los grupos poblacionales, esta crisis sanitaria está afectando directamente a la salud mental de los trabajadores.
Por Lucía Membrado
Negocios que han aumentado gracias a la pandemia
Estrés, preocupación, desconcierto, ansiedad son algunos de los sentimientos que más estamos experimentando los españoles estos últimos meses. Esto conlleva un aumento en la petición de ayuda de las personas que quieren aprender a manejar estas emociones, quienes, por ende, buscan un apoyo psicológico. Cristina Equiza, psicóloga clínica, afirma que en su consulta sí ha habido un aumento de la demanda y de la solicitud de consulta de aquellas personas que quieren exponer sus dificultades, miedos… pacientes con cuadros de ansiedad, fobias, duelos que superar. Explica que hay personas que necesitan una ayuda puntual, lo que se suele traducir en un par de sesiones, y otras que necesitan un seguimiento terapéutico extendido en el tiempo.
Otro negocio que se ha visto beneficiado por esta pandemia son los supermercados, se consideran trabajo esencial y, por tanto, no han cerrado ni un solo día. El abastecimiento de las baldas ha sido la parte más perjudicada ya que los clientes han comprado de forma masiva. Productos como el papel higiénico, artículos de repostería o alimentos en conserva son algunos de los productos que estuvieron agotados en numerosas ocasiones durante los meses de confinamiento domiciliario. La preocupación por no conocer el devenir de la situación que se vivía en cada momento hacía que las personas comprasen y aprovisionasen compulsivamente, un hecho que beneficia a todos los colectivos empresariales que conforman, fundamentalmente las grandes cadenas de supermercados.
Negocios que se han visto obligados a cerrar sus puertas
Sin embargo, lo que más ha sucedido durante estos meses son los cierres de cientos de negocios. Los sectores más afectados son los de la hostelería, el turismo, los gimnasios… aquellos en los que las restricciones de movilidad, horario de cierre y aforo afectan directamente. Ante todas estas medidas, un gran número de empresarios se ha visto obligado a cerrar sus negocios ya que les resultaba imposible seguir manteniendo su local, así como el sueldo de sus trabajadores y los gastos propios de sus actividades.
La inseguridad sobre el futuro nos hace vivir con miedo
Manuel Pelegrín, copropietario de un gimnasio
Otros negocios, sin embargo, han podido seguir adelante pese a encontrarse asfixiados por la situación. Muchos de ellos se han visto obligados a adoptar medidas extraordinarias para que esto fuese así. Hablamos de los ERTE – los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo que actualmente están prorrogados hasta el 31 de enero de 2021 – para negocios como las peluquerías han sido un salvavidas. Belén Martínez, propietaria de una peluquería, afirma que para ella el ERTE ha sido una ayuda. Por las restricciones relativas al aforo máximo en el local, no se podía permitir mantener a toda la plantilla trabajando, por lo que tampoco podía obtener de su negocio los ingresos suficientes como para mantener la nóminas de todos los trabajadores y los gastos de la propia peluquería.
El constante abrir y cerrar negocios dependiendo del grado del estado de alarma en el que se encuentre la Comunidad Autónoma supone una gran carga mental para los propietarios de los establecimientos: «La inseguridad sobre el futuro inmediato, esta incertidumbre nos hace vivir con un miedo constante a lo que puede pasar de no cambiar rápidamente el entorno social. Esta situación ha provocado en algunos trabajadores síntomas de ansiedad y depresión que afectan a su ánimo y entorno familiar. Tememos por nuestro futuro inmediato que es nuestra forma de vida y lo que nos lleva el pan a nuestras casas», comenta Manuel Pelegrín, copropietario del gimnasio Island Fitness Center.
Sin lugar a dudas, el sector que más afectado se ha visto ha sido el del ocio nocturno. Estos negocios llevan más de 10 meses cerrados y no han recibido más que dos mil euros de ayudas por parte del Gobierno de Aragón. La mayoría de locales han intentado reconvertir sus locales y adaptarse a las medidas de seguridad necesarias para poder abrir, pero el aumento de casos positivos les ha hecho imposible sacar su negocio adelante.
Nuevas formas de trabajo
Estos meses de pandemia han servido para que la gente busque modos de reinventarse, para demostrar talentos ocultos y para buscar nuevas formas de realizar su trabajo habitual. Este es el caso de muchos restaurantes que, tras ver que no podrían servir cenas o comidas en sus instalaciones, han decidido implantar servicios de take away – ir al restaurante a por la comida y llevártela para comer en casa –. Otros se han sumado a las cadenas que llevan la comida a domicilio, lo que les permite dar un servicio que antes no planteaban pero que ahora les resulta necesario para poder salir adelante.
Cristina Equiza, psicóloga clínica, también ha reinventado su trabajo al ver su consulta cerrada, ya que se vio en la necesidad de hacer sus sesiones de terapia de manera online a través de plataformas virtuales como Skype, Zoom o Teams. Con respecto a estas, como en todo, hay división de opiniones, ya que hay personas a las que les gusta el formato y deciden continuar así, y otros a los que no les resultaba cómodo, hasta el punto de decidir dejar la terapia.
Las patologías que afectan en mayor medida a la salud mental de la población, a causa de la covid-19, son aquellas relacionadas con la falta de trabajo, la sobrecarga en otros negocios, la duda y la incertidumbre sobre el futuro, tanto inmediato como el prorrogable en el tiempo. Será este, el tiempo, el único capaz de resolver a todas las cuestiones que todavía hoy, casi un año después del comienzo de esta pesadilla, siguen en el aire.
Comentar