Reportajes

Sanitarios aragoneses y la COVID-19

El personal sanitario de la región comenta las principales dificultades acontecidas en su sector por el virus y critica duramente la falta de información a la hora de atender a infectados.

Javier Marión, Gerente del Servicio Aragonés de Salud llora por la falta de material para sanitarios / Fuente: Redacción Médica

ACTUALIZADA 23/04/2020 A LAS 14:05

MARINA BALLESTER – ZARAGOZA /23 DE MARZO DE 2020

El coronavirus genera estragos allí por donde pasa. Es por ello por lo que la mayoría países nos encontramos en estado de cuarentena para paliar de la manera más rápida el efecto devastador que está generando este agente infeccioso. 

España entra dentro del ranking de los cinco países más afectados por el COVID-19, donde Aragón es una de las comunidades autónomas con mayor número de infectados pertenecientes al personal sanitario regional, con más de 70 casos según comunica el Departamento de Sanidad Aragonés.

La falta de información y los cuchicheos por los pasillos de hospitales y residencias han desencadenado bulos, malas praxis y alarma social, motivos por los cuales falta material sanitario y ha habido más contagios.

Datos Sanitarios en Aragón 

Si bien hay que indicar que Aragón cuenta con un total de 329 casos y 14 fallecidos (solo Madrid posee 12300 casos y 1500 fallecidos) y las UCIs de la región todavía no están completas, es interesante conocer cuál es el protocolo de actuación establecido cuando hay casos positivos y las medidas de protección que disponen los sanitarios a la hora de realizar su trabajo, procedimientos que, si se realizan con criterio, paliarían la crisis del COVID-19 de manera eficiente.

Atendiendo lo indispensable

El Jefe de Servicio de Cirugía Cardiovascular en Aragón, Carlos Ballester Cuenca, comenta la importancia de ejercer de líder en momentos decisivos donde se deben mantener en todo momento informado al equipo sanitario: “Es esencial mantener al tanto a tu equipo desde el primer momento que recibes informaciones oficiales para poder actuar de la manera más segura y eficaz”. 

También señala que, en todas las especialidades que necesiten de quirófanos, han tenido que reducir operaciones ya que es indispensable salvaguardar un quirófano para infectados de coronavirus: “Todos los jefes de servicio estamos en un grupo de WhatsApp donde presentamos los casos más urgentes a dirección y, entre dirección y planta, decidimos qué es indispensable operar en el día y qué debe esperar”. 

Ballester afirma que “no es tan fácil determinar qué paciente debe operarse y cual debe esperar. No nos interesa, en este momento, realizar intervenciones complicadas que requieran de la estancia del enfermo en UCI de postoperatorio, ya que son camas ocupadas que van a ser necesitadas cuando la cosa empeore”.

El protocolo de actuación ante un posible caso de coronavirus en el hospital es el siguiente: “Se realiza una exploración con unos trajes especiales que protejan al personal médico, donde se saca un diagnóstico. Si es positivo, se empieza a tratar en función de la gravedad del contagio. Puede ser desde Paracetamol hasta necesidad de ventilación mecánica asistida”.

El doctor asegura que “en Aragón, hasta donde yo sé, no vamos a vernos colapsados ya que estamos dejando las máximas camas libres para enfrentarnos a lo que nos espera.  Estamos todos muy mentalizados”.

Leyenda repartida por el Salud sobre el material para atender contagiados por coronavirus

 “No nos interesa, en este momento, realizar intervenciones complicadas que requieran de la estancia del enfermo en UCI de postoperatorio, ya que son camas ocupadas que van a ser necesitadas cuando la cosa empeore”

Según fuentes cercanas al Hospital Miguel Servet, consta que hay servicios cuyos directores no se han pronunciado aún sobre el coronavirus ni han informado a sus trabajadores de cuales son las pautas y los procedimientos a seguir. Otros departamentos son los que han mantenido al tanto de todo a dicho gremio.

Esto ha ocasionado un ambiente de agobio y confusión donde el boca a boca ha sido el mayor generador de incertidumbre entre los trabajadores: celadores y personal de limpieza gastando mascarillas, disputas en reuniones, bajas por infecciones, insistentes dudas sobre cómo actuar con un contagiado… cosas que se podrían haber evitado con una previa organización y preparación para lo que, inevitablemente, nos iba a llegar tarde o temprano.

Consecuencias de una mala gestión

Mariola Zapater Plana, enfermera del mismo hospital, alega que es indispensable mantener a los ciudadanos informados de que “materiales como mascarillas o guantes solo son necesarios para el personal sanitario. Los demás no deben gastar estos suministros para “ir a la compra” o “pasear al perro”. 

Zapater añade que “enfermeras y médicos están teniendo que repetir mascarillas porque se han terminado, pero los pacientes siguen en aumento y hay que tratarlos”.

“Lo ideal sería estar un número indispensable hasta que se pueda y los demás localizados. Así evitaríamos contagios entre el personal.” / Autora: Marina Ballester

Continúa cuestionando la mala gestión de las altas esferas ya que “nos encontramos haciendo lo indispensable el mismo número de personas que antes, por lo que nos concentramos diez personas en una sala de 10 metros cuadrados”. “Lo ideal sería estar un número indispensable hasta que se pueda y los demás localizados. Así evitaríamos contagios entre el personal.”

“Enfermeras y médicos están teniendo que repetir mascarillas porque se han terminado, pero los pacientes siguen en aumento y hay que tratarlos”

Incertidumbre en las residencias

En las residencias de ancianos la situación es similar, aunque tienen un factor de riesgo más elevado por la edad media de los ahí presentes. Por ello, casi todos los fallecidos de Aragón son personas que vivían en residencias. 

María Terrade Manzini, auxiliar de geriatría, comenta el miedo y la incertidumbre que se vive a diario por falta de información: “De un día para otro, nos comunicaron que la segunda planta se utilizaría como confinamiento”, y afirma “un día había dos o tres ancianos y, al día siguiente, ya no estaban”. 

Casi todos los fallecidos de Aragón son personas que vivían en residencias. / Autora: María Terrade

Para María Terrade es una situación bastante agobiante, ya que está diagnosticada con asma crónica. “Yo tengo que seguir trabajando sin la certeza de saber si a quien estoy atendiendo tiene una simple fiebre o está contagiado”, afirma.

De momento, en su lugar de trabajo dispone de material sanitario para cumplir con su trabajo, pero también indica el elevado número de bajas que se han producido en esta última semana: “Muchas de mis compañeras han tenido síntomas reales. Otras han aprovechado la situación para no exponerse ni trabajar.”

La residencia “La Abubilla de Yéqueda” , a 5 kilómetros de Huesca, ha sido acondicionada para acoger a los primeros ancianos con el virus que no necesiten de hospitalización. Esta medida se enmarca dentro del llamado “Dispositivo especial de ciudados COVID-19” que ha puesto en marcha el Gobierno de Aragón para evitar la propagación del virus en residencias.

Medidas desde la DGA

Aragón, siguiendo el ejemplo de otras comunidades como Andalucía, Galicia o La Rioja, ya está tomando medidas para acelerar el diagnóstico de posibles casos de coronavirus, con la realización de pruebas de coronavirus desde el coche, donde el presunto portador del virus no tiene contacto con nadie; la habilitación de la app “Salud Informa”, donde los usuarios responden preguntas sobre sus síntomas y son contactados en caso de duda, o la instauración de un hospital de campaña cuya ubicación es la Feria de Muestras de Zaragoza.

El Gobierno de Aragón explica las futuras medidas sanitarias:

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