De todo lo que he leído y he visto hasta hoy sobre las elecciones a la presidencia de Brasil 2014 me quedo con la divertida publicación del site sensacionalista en la que se dice que hubo un tiempo en el que la dicotomía en Brasil estaba entre la elección de vodka o agua de coco, a tenor de la música vodka ou água de coco, y hoy se encuentra entre ¿Dilma o Aécio? El país se ha dividido entre los que quieren que el Partido de los Trabajadores (PT) siga con Dilma Rousseff en el poder, y los que prefieren un cambio de gobierno con Aécio Neves y el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB).
Tres eran los principales candidatos que comenzaron la carrera hacia la presidencia de la República de Brasil en las elecciones de este año celebradas en octubre de 2014: Dilma Rousseff, actual presidenta y de nuevo candidata por el Partido de los Trabajadores (PT); Aécio Neves, candidato por el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB); y Marina Silva, que se presentaba por el Partido Socialista Brasileño (PSB). El caso de Marina Silva en estas elecciones ha sido especial, ya que se presentaba como vicepresidenta por el PSB, pero tuvo que tomar el mando de la candidatura tras la trágica muerte del que era el candidato y presidente de su partido, Eduardo Campos, en un accidente aéreo el pasado 13 de agosto de 2014.
El domingo 5 de octubre tuvo lugar la votación del primer turno en el cual uno de los candidatos es electo si consigue más del 50% de los votos. En este caso, ninguno de ellos consiguió más de la mitad de los votos, y por consiguiente tendrá lugar un segundo turno de votación el próximo domingo 26 de octubre. En este segundo turno se enfrentan la actual presidenta Dilma Rousseff (PT) y Aécio Neves (PSDB), tras conseguir el pasado 5 de octubre el 41,59% y el 33,55% de los votos respectivamente. Marina Silva consiguió el 21,32% de los votos, por lo que no puede presentarse al segundo turno, ya que solo se presentan los dos candidatos que lograron más votos. Por lo que, la “segunda vuelta” se decidirá entre petistas y tucanos, tal y como son llamados los votantes del PT y del PSDB respectivamente. Hay que señalar que los petistas son los más identificados con los obreros y trabajadores y el PSDB con las personas de mayor poder adquisitivo, aunque esto es tan solo una generalización.
El pasado martes 14 de octubre tuvo lugar el primer debate político del segundo turno entre Dilma Rousseff y Aécio Neves, del cual ya se ha dado buena cuenta en las redes y ha dejado un Brasil dividido en los medios sociales y fuera de ellos. La ruptura se establece entre los que quieren la continuidad del PT en el Gobierno (lleva doce años) y los que quieren que salga del poder como sea.
Tras el primer turno, Marina Silva dio su apoyo al candidato Aécio Neves para dar fuerza al derrocamiento del PT, puesto que si consiguen unir a los votantes del PSB y del PSDB, la posibilidad de que Dilma Rousseff no sea elegida es mucho mayor. Los primeros sondeos de este segundo turno confirman esta medida, ya que Neves contaría con un 54% de los votos y Rousseff con un 46%. Si bien, los brasileños se encuentran escépticos ante estos sondeos, pues en el primer turno no se correspondieron mucho los datos finales con los que se mostraban las encuestas antes de la votación.
Algo que me llamó la atención fue la propaganda electoral en los descansos de primer debate del segundo turno entre Aécio y Dilma. Fue muy agresiva, directamente contra los candidatos y partidos, del PT contra el PSDB y viceversa. Tan directa como una del PT que decía “Aécio, quien le conoce no le vota”.
Las discusiones en el medio social entre los pro-Dilma y los pro-Aécio han hecho que muchos amigos excluyan a parte de sus amistades en las redes o escondan las publicaciones que no quieren ver en sus timelines. Se han creado dos bandos que se han declarado la guerra digital en estas elecciones presidenciales de Brasil.
He de decir que son las elecciones más digitales que he visto, y puede que sea porque los brasileños son un público muy activo en el medio social. Tanto es así que el país vio nacer el perfil de Dilma Bolada, una caricatura de Dilma Rousseff que cuenta con más de un millón y medio de seguidores en Facebook y 295.000 en Twitter @dilmabr. Este perfil es el referente de los petistas, pues el creador, el publicitario Jeferson Monteiro, se ha convertido en consultor de la campaña de la presidenta Rousseff.
Rousseff tiene que hacer frente a los escándalos de corrupción dentro de la mayor empresa de Brasil, la petrolera estatal Petrobras, de la cual fue presidenta entre 2003 y 2010, años en los que se dieron algunos casos de corrupción que están siendo investigados ahora. Por otra parte, Aécio Neves se enfrenta a acusaciones por la construcción de un aeropuerto financiado con dinero público en tierras de un familiar suyo, el cual ya ha conseguido hashtag propio #Aecioporto, haciendo un símil con la palabra aeroporto. Si bien, Rousseff también tiene su hashtag #RousSelfie, la creatividad no falta en estos momentos de tensión política.
Estos temas han sido el blanco de ambos candidatos durante los debates, y en el primer debate del segundo turno volvieron a aparecer.
El país, por lo tanto, ha quedado dividido entre los que van a votar al PT y los que, aunque no les termine de gustar Aécio Neves (PSDB) le van a votar simplemente porque no quieren otra legislatura de “petistas”. Esto ha provocado más de una discusión en las redes sociales, además de la creación de todo tipo de memes, pues estas elecciones están siendo una “batalla” literal en las redes sociales. Finalmente, la cuestión es no votar a Dilma como se ve en esta imagen compartida en las redes sociales: “Dale like si estás entre el 62% de los brasileños que no votaron a Dilma en el primer turno”.
Me encanta la experiencia de poder vivir las elecciones presidenciales de otro país y observar las diferencias que existen con España. En Brasil me he dado cuenta de que son muy directos unos partidos contra otros en sus propagandas y a la hora de hablar de sus programas, y los candidatos también lo son entre ellos, tanto en el momento de enfrentarse en un debate como de hacer declaraciones.
Isabel Gareta es egresada de Publicidad y Relaciones Públicas de la Universidad San Jorge y Máster en Marketing y Comunicación Corporativa de la misma universidad. Se encuentra completando sus prácticas profesionales en Brasil en la consultura Llorente & Cuenca.
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